“La paz esté con ustedes” el mensaje dominical del Obispo Pedro Pablo

1. Ocho días después de la resurrección de Jesucristo, los apóstoles están en el Cenáculo, donde se habían reunido con Cristo, pero Él ya no está, al igual que Judas y Tomás. Están todos tristes y deprimidos como cuando ha muerto un gran amigo al que todos querían entrañablemente. De repente ese gran amigo aparece en medio de ellos y les dice: “La paz esté con ustedes” y todos se llenan de alegría, no se la creen pero están felices.

2. Jesucristo resucitó para estar con nosotros, en medio de nosotros. Donde dos o tres están reunidos en su nombre, Él está con ellos. Cristo resucitó para estar con cada uno de nosotros y llenarnos de paz. Cuando Dios está con nosotros hay paz. Nuestro corazón está hecho para descansar en Dios y si Él no está, nuestro corazón se pone inquieto y sin descanso. Por eso Cristo quiere estar con nosotros para que tengamos paz y alegría en nuestro corazón.

3. También Jesús sopló sobre sus apóstoles y les dijo: “reciban el Espíritu Santo, a quien les perdonen los pecados, les quedarán perdonados”. Hay que pedirle perdón a Dios siempre que hemos fallado. Él no se cansa de perdonarnos, lo hace siempre con muchísimo gusto y con todo el amor de su corazón que derrama misericordia.

4. El Señor de la Misericordia ahí está, en su imagen tan hermosa y quien se apareció a Sor Faustina, para decirnos: “aquí están todos los torrentes de mi misericordia”. Nos perdona todos nuestros pecados, basta que tengamos fe. Él nos da la misión para que nosotros compartamos nuestra fe. Seamos hombres y mujeres de fe y digamos como Santo Tomás: “Señor mío y Dios mío” y reconozcámoslo como salvador nuestro. Así sea.

obispo pedro pablo

Botón volver arriba