De Tijuana a Cancún con 26 pares de tenis, ‘por las venas de México’

Carlos Águila Arreola

Cancún, domingo 31 de octubre del 2021.- La ruta Baja California-Quintana Roo es la más socorrida: apenas en octubre, el ‘Forrest Gump’ Jonas Deichmann corrió cinco mil 40 kilómetros de Tijuana a Cancún, lo equivalente a 120 maratones, en igual número de días; ahora, Germán Silva García, ganador del Maratón de Nueva York dos veces (1994 y 1995), buscará superar la hazaña del teutón en 100 días.

El germano —busca comprar bicicletas para que los niños de África puedan ir a estudiar— nadó casi 500 kilómetros en Croacia; cruzó Europa, Rusia, Japón y Corea en biciclo, y en América solo México lo dejó entrar durante la pandemia; el maratonista poblano, por su parte, correrá el país como homenaje a la riqueza cultural de México.

A partir del 2 de noviembre (el martes), Germán Silva empezará en Tijuana un hecho histórico con el “Proyecto Pinole, corriendo por las venas de México” —el trayecto más grande jamás hecho por un atleta en México: correr cuatro mil 500 kilómetros hasta Cancún—, con tramos diarios de entre 40 y 45 kilómetros diarios y un día de descanso a la semana.

Germán Silva recorrerá el país para mostrar la grandeza del país en su nuevo reto deportivo durante 3.7 meses o 14.2 semanas; es decir, tendrá 14 días de descanso, que no se cuentan en los 100 que correrá. Se estima que concluya el recorrido “por las venas de México” entre el 10 y el 24 de febrero del próximo año, contando posible imponderables durante el trayecto.

El mexicano recorrerá 19 estados de los 32 de México, un reto exigente a su edad —cumplirá 54 años durante el recorrido, el domingo 9 de enero—, en el que estima utilizar 24 mudas de ropa y unos 26 pares de tenis, según cálculos del deportista, subcampeón de Medio Maratón en Oslo 1994, y quien dice estar preparado, según lo demostrado en los últimos años.

Silva García fue sexto en 10 mil metros en los Juegos Olímpicos de Barcelona 1992, y en el maratón en Atlanta 1996. Tras su retiro sigue activo en carreras de 42 kilómetros 195 metros y el ultramaratón, que se realiza en Nueva York durante 52 días corriendo el equivalente a dos convencionales (84.3 kms), de las 06:00 a la medianoche, dando más o menos 100 vueltas por día a una misma manzana (de media milla / 804.6 metros) en el barrio de Queens.

Orgulloso de sus raíces, hará un homenaje a la riqueza cultural de México, a sus paisajes, su gente y sus costumbres: “Todo nace porque estoy agradecido con mi país por todo lo que me ha dado. Sé lo que es representar a una nación; tener ese honor. He vivido fuera y orgullosamente vi el impacto de las cosas que tenemos: naturaleza, costumbres, Pueblos Mágicos y nuestra cultura#.

“Como maratonista de alto rendimiento corríamos entre 35 y 40 kilómetros diarios en dos sesiones, eran cerca de 270 kilómetros a la semana, y el cuerpo tiene memoria. Si se está entrenando para ese reto, lo va a lograr. Es como un viaje al tiempo de lo que me platicaban mis padres en Tecomate (Veracruz)”, expresó Germán hace unas semanas.

Su padre fue arriero y viajaba entre los estados de Puebla y Veracruz, así que esta vez no competirá por una medalla, una bolsa de efectivo o un trofeo, la idea es documentar todo el trayecto para mostrar la mejor cara del país, una en la que destacan sus playas, desiertos, montañas y ciudades para que su hija Zyanya elaboré una serie documental, para lo que ya tiene ofertas.

El mote de Pinole desde su época de atleta se debió a que “era el atole que mi mamá nos daba en las mañanas para darnos energía y aguantar las largas caminatas a la escuela y las jornadas en el rancho; la bebida prehispánica es el alimento de mis amigos rarámuris, expertos en ultradistancias. Quiero dedicarlo a mi padre y mi hermano Vicente, quien falleció corriendo en 2016”, indicó,

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