Obama disfruta de una buena cerveza antes de la cumbre del G-7
Ciudad de México a 09 de junio de 2015 – La cerveza es una bebida que gusta a miles y los políticos no son la excepción, en la reciente cumbre del G-7, Angela Merkel dio la bienvenida a Barack Obama con un desayuno tradicional de Baviera complementado con medio litro de cerveza.
El presidente Obama había volado a través del Atlántico para conocer a la señora Merkel, a David Cameron y a los otros líderes del G-7 en un exclusivo resort spa en los Alpes.
Pero antes de que pudiera ponerse a trabajar, la presidenta de Alemania le concedió un desayuno típico de Baviera compuesto de salchichas blancas, pretzels y cerveza espumeante.
10 cosas de las que Putin se perdió en Baviera:
En algunas partes del mundo, las once de la mañana puede ser considerado un poco temprano para tomarse una cerveza, pero en Baviera el desayuno no está completo sin una weissbier, como se le llama a la cerveza de trigo local.
Esto no es tan duro como suena ya que los residentes de Baviera no acostumbran hacerlo cada mañana antes de dirigirse a la oficina. La tradición tiene origen en Frühschoppen la cual consiste en reunirse para tomar una copa a medio día, los domingos y los días festivos.
Obama tiene la razón, una cerveza a media mañana es una de esas raras alegrías de la vida
Según la costumbre de Baviera, uno de los alimentos típicos son las salchichas las cuales son frescas y no utilizan conservadores, no se pueden comer después de las 12 horas. Por lo tanto, aquellos que desean comer tal platillo con una cerveza deben hacerlo antes de esta hora. Además el dicho local es que las salchichas no deben oír las campanas de la iglesia que se tocan al mediodía.
Obama bebió su cerveza con el sonido tradicional de los “Alpenhorns” acompañado por gente del lugar, que iban con los trajes de pantalones de cuero y dirndls.
«Cuando escuché por primera vez que Angela sería la anfitriona del G-7 en Baviera, esperaba que fuera durante el Oktoberfest, pero por otra parte nunca hay un mal día para una cerveza y una “weisswurst”, como se le llama a la salchicha”, comentó Obama.
Más tarde bromeó diciendo que deberían de mantener las conversaciones del G-7 «disfrutando de un vaso de cerveza».
Cabe mencionar que un granjero local confirmó a los periodistas que en realidad Obama había bebido cerveza sin alcohol durante el desayuno, por lo cual no habría porque preocuparse por su desempeño en la cumbre.