Durante el 2018 en Holbox y Cozumel Profepa realizo 39 clausuras

La Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (PROFEPA), durante 20018, realizó visita de inspección en la Isla de Holbox y en la Zona Hotelera de Tulum, Quintana Roo, donde impuso 21 y 18 clausuras a predios y proyectos inmobiliarios, respectivamente.

Cabe precisar que todas las medidas de seguridad se impusieron para evitar que se continuara con la afectación de los recursos naturales presentes en el ecosistema costero, ante la falta de implementación de medidas para mitigar o prevenir los impactos generados por las obras y actividades inspeccionadas, así como por no contar con las respectivas autorizaciones de Cambio de Uso de Suelo en Terrenos Forestales y de Impacto Ambiental que expide la SEMARNAT.

Durante gira de trabajo en el estado de Quintana Roo, el titular de la PROFEPA, Guillermo Haro Bélchez, revisó junto con el Subprocurador de Recursos Naturales, Ignacio Millán Tovar, el Delegado Federal de la PROFEPA en el estado, Javier Castro Jiménez, y el Procurador de Protección al Ambiente de Quintana Roo, Miguel Nadal Novelo, los avances de las acciones emprendidas por esta dependencia federal en la entidad.

Los predios y proyectos que se verificaron en la Isla de Holbox, se localizan en un ecosistema costero con presencia, en algunos de ellos, de vegetación de manglar representado por las especies mangle botoncillo (Conocarpus erectus), mangle negro (Avicennia germinans), mangle blanco (Laguncularia racemosa) y mangle rojo (Rhizophora mangle).

Asimismo, con presencia de vegetación de duna costera caracterizada por vegetación halófila costera y vegetación de matorral costero conformada principalmente por palma chit (Thrinax radiatta).

Las especies de mangle  y palma chit se encuentran enlistadas en la Norma Oficial Mexicana NOM-059-SEMARNAT-2010, en la categoría de especies amenazadas.

También, la PROFEPA examinó la problemática de la pérdida de playa y modificación de la morfología costera en la Isla de Holbox, donde se han perdido calles de la isla;  situación que prevalece.

En el 2014, con base en una metodología basada en el criterio de vulnerabilidad costera, la población y los ecosistemas en isla Holbox son vulnerables a la inundación y erosión costera, lo que ha generado el desplazamiento de la línea de costa, la destrucción de hábitats, daño a las estructuras de los desarrollos inmobiliarios y la salinización de acuíferos, entre otros.

La Delegación Federal de esta Procuraduría en el estado de Quintana Roo implementó actuaciones de inspección en la isla Holbox, que datan desde el año 2001; por lo que se hizo una prospección en la isla con objeto de conocer la situación que prevalecía respecto de las obras y actividades de competencia federal y la ocupación de la ZOFEMAT.

En ese sentido, existen desarrollos inmobiliarios y prestaciones de servicios turísticos que carecen de la autorización de impacto ambiental.

En la zona de humedal costero de manglar se ha identificado la apertura de brechas y la lotificación de predios, que han implicado la remoción de manglar y la compactación del suelo natural para la construcción de casas-habitación principalmente. Obras como rellenos e instalaciones que obstruyen el libre tránsito por la ZOFEMAT.

Además, la construcción y rehabilitación de espigones, lo que está ocasionando, en algunas áreas, la pérdida de playa; así como la acumulación de sargazo en estado de descomposición, ocasionando un foco de infección.

Aunado a lo anterior, se detectó la pérdida de playa y la modificación de la morfología costera, incluso se han perdido calles de la isla señaladas en el Plan de Desarrollo Urbano de Lázaro Cárdenas;  situación que prevalece  hoy día.

La Procuraduría Federal de Protección al Ambiente clausuró 18 desarrollos inmobiliarios en la Zona Hotelera de Tulum, Quintana Roo, debido a que no contaban con las autorizaciones de Impacto Ambiental que expide la Secretaría de Medios Ambiente y Recursos Naturales (SEMARNAT).

Lo anterior como resultado de un operativo llevado a  cabo por la PROFEPA, con el objetivo de verificar que se cuenten con las autorizaciones indicadas y cumplan con la legislación ambiental federal vigente.

Personal de la PROFEPA instrumentó el citado operativo e inspeccionó 19 desarrollos inmobiliarios; 18 de ellos fueron verificados en materia de impacto ambiental, y en los cuales se impusieron medidas de seguridad consistentes en 12 clausuras totales temporales y 6 clausuras parciales temporales.

Aunando a lo anterior, se encontró que efectuaban actividades de limpieza, poda, tala y corte de ejemplares de vegetación donde se localiza el ecotono conformado por vegetación de matorral costero, resultado de los trabajos de construcción realizados.

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