Denuncia Obispo @PedroPablObispo profanación del Santísimo Sacramento en Cancún

El Obispo de la Prelatura de Cancún-Chetumal, Pedro Pablo Elizondo, denunció públicamente que el jueves 21 de septiembre descubrieron «una grave profanación del Santísimo Sacramento de la Eucaristía en la iglesia Cuasi parroquia del Espíritu Santo, de la localidad de Villas Otoch, en la SM 247”, ya que fueron abiertos el Sagrario y los copones que se encuentran en Sacristía, robaron las especies eucarísticas y otras fueron esparcidas por el suelo, mientras se celebraba la Santa Misa a las 7:30 pm

Pese a esta adversidad, el Obispo, llamó a los católicos a sumarse a la celebración eucarística “Con el deseo de reparar este acto sacrílego se celebrará una Hora Santa y una Santa Misa de desagravio en la misma iglesia de la cuasi parroquia del Espíritu Santo el próximo jueves, día 28 de septiembre, a las 18:30 horas a la que invito a todos los católicos de la Prelatura de Cancún-Chetumal, sacerdotes, religiosos y laicos, a acompañar a los fieles de esta parroquia en este momento doloroso de su historia local”.

Como comunidad católica de Quintana Roo, llamó a los sacerdotes de todas las iglesias a llevar actos de desagravio.

“Este hecho nos duele profundamente. Se trata de un acto sacrílego contra el mayor tesoro que tenemos los católicos: la Santísima Eucaristía. Por ello, como Obispo pido a los sacerdotes que en todas las parroquias se lleven actos de desagravio y de reparación sea con la celebración de la Eucaristía o con la exposición prolongada del Santísimo Sacramento con turnos de adoración”.

 

 

Ante la adversidad, Pedro Pablo Elizondo, exhortó “a todos fieles católicos a aprovechar lo acontecido para renovar nuestra devoción eucarística. Detrás de este suceso se esconde una llamada a la conversión dirigida a cada uno de nosotros. Hagamos de este agravio una oportunidad de desagravio. Que esta ofensa sea

ocasión para suscitar y manifestar nuestro amor hacia Jesucristo,

presente en la Eucaristía”.

 

“Finalmente quiero manifestar a la opinión pública que este acto sacrílego es, por desgracia, un episodio más de una espiral que atenta impunemente al legítimo ejercicio de la libertad religiosa de los católicos y la libre predicación del Evangelio en una sociedad plural”, concluyó el prelado.

Botón volver arriba